La conversión es un proceso de cada día tendiendo a dejar de lado lo que nos aparta de Cristo, y reemplazarlo por lo que acerca a Cristo. Esta conversión es esencialmente vital… A esta vida de Cristo hemos de convertir (sin descanso ni tregua) nuestra miserable vida, en una conversión permanente, para que se realicen en nosotros las promesas (Rovirosa. Militantes, OC. T. V, pág. 381).
Ver más oraciones aquí.
Para saber cómo bajar este documento, imprimir, etc. ver:
“Cómo descargar documentos en nuestra web”