Para los cristianos no puede haber otro pastor y guía que Jesús. Solo desde él aprendemos a vivir; él es la manera más humana de vivir. Nuestra vida se nos da para entregarla y crece a medida que se entrega por amor. El estilo de ser buen pastor de Jesús es una de las líneas que ha de caracterizar el proyecto comunitario de los cristianos, de la Iglesia. No caben privilegios, no podemos sentirnos dueños de las personas. Solo cabe el servicio, la corresponsabilidad, la ministerialidad que se hacen gestos de una vida entregada a favor de los demás, para que tengan vida.
Para saber cómo bajar este documento, imprimir, etc. ver: